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Cosas de conejos: Quien congenia con quien

Los conejos enanos se encuentran mejor al lado de un compañero de su especie que solos. La condición previa para una convivencia en grupo es un hogar lo suficientemente grande para ello, como mínimo de 90x60x50 cm para dos animales.

Los animales deberían haberse criado juntos o haber convivido ya pacificamente en la tienda. Las hembras solamente se pueden juntar cuando se conocen entre sí. Una vez adultas y alcanzada la madurez sexual no se pueden juntar dos hembras (se reconocen por el olor que desprenden). Las hembras toleran a los machos, siempre que éstos estén castrados y se conozcan desde pequeños. Tampoco se pueden juntar dos machos, ya que una vez alcanzada la madurez sexual, son inevitables las luchas por el territorio y el rango.

Estos animales marcan su territorio esparciendo los liquidos de sus glándulas odoríferas y salpicando orina, lo que puede resultar desagradable en lugares cerrados.

Tanto las hembras como los machos son aptos para tenerlos individualmente. Si uno no se quiere dedicar a la crianza, se recomienda castrar al macho una vez alcanzada su madurez sexual, y como muy pronto a los ocho meses. El sexo del animal no tiene importancia cuando se tiene como animal único; el problema en tal caso es que necesitan más atención, se requiere una dedicación especial y quieren ser entrenidos para no sentirse solitarios. En las tiendas los animales casi siempres  están separados por sexos. Solamente el ojo experto puede distinguir el sexo de los conejos enanos a las siete u ocho semanas de edad.

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